El Arzobispo animó a los catequistas de adultos a “seguir escuchando y ayudando a vivir el encuentro con Jesús”
Este sábado 21 de octubre, en los salones de la Iglesia Catedral, el Arzobispo Gabriel Mestre participó de un encuentro de catequistas de adultos de la Arquidiócesis, que fue convocado por la Junta Catequística y se llevó a cabo con el lema “Concede a tu servidor un corazón comprensivo (1 Re 3, 9). El desafío de comunicar la fe a los adultos”.
La jornada inició con la bienvenida del Arzobispo a los 260 catequistas que participaron y luego guió el momento de meditación y reflexión con la exposición del Santísimo Sacramento.
En la primera parte del encuentro y a la luz de un texto del Libro de los Reyes, en la que Salomón le pide a Dios que le conceda un corazón que escuche o que comprenda escuchando, Mons. Mestre instó a los catequistas a ser sabios al servicio del Pueblo de Dios, con esa actitud de aprender a escuchar y comprender al otro.
Luego de un pequeño receso, en la segunda parte se realizó un trabajo mayormente práctico y partiendo del eje “Recibir la vida como viene”, con las diversas situaciones a las que se enfrenta la actual sociedad y de todos los adultos que se acercan a la catequesis, sea para iniciar un proceso para recibir los sacramentos, de forma ocasional y/o entorno al bautismo de sus hijos, para un matrimonio, catequesis en las cárceles u hospitales.
Asimismo, reflexionando en torno a la Parábola del Juicio Final (Mt. 25. 31-46) y la Parábola del Buen Samaritano (Lc 10, 25-37), los catequistas trabajaron sobre un mapa de palabras que les permitió profundizar sobre aquellas actitudes favorables que pueden asumirse y cuáles son esas actitudes contrarias que en ciertas ocasiones se presentan.
En ese sentido, surgieron reflexiones muy positivas y productivas para que los catequistas continúen pensando en cómo poder acompañar los procesos de fe en la vida de los adultos y ante la complejidad del mundo actual, asumiendo el desafío de seguir ayudando a vivir el encuentro con Jesús.
La jornada finalizó con la bendición del director de la Junta Catequística Arquidiocesana, Pbro. Gerardo Gallo.
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