Este viernes 3, el clero platense peregrinó a Luján.

El Arzobispo de La Plata, Mons. Héctor Aguer, junto a su Obispo auxiliar, Mons. Nicolás Baisi, en la sacristía, antes de la Santa Misa (Viernes 3 de Noviembre de 2017).

En la Consagración.

Comunión de los sacerdotes concelebrantes.

Como lo hace siempre en noviembre, el clero platense peregrinó este viernes 3, primer viernes de mes, y memoria de San Martín de Porres, al santuario de Nuestra Señora de Luján. Presidió la Santa Misa, poco antes del mediodía, el Arzobispo de La Plata, Mons. Héctor Aguer; con quien concelebraron su Obispo auxiliar, Mons. Nicolás Baisi, y sacerdotes diocesanos y religiosos destinados en los cinco partidos que integran la Arquidiócesis: La Plata, Berisso, Ensenada, Magdalena y Punta Indio.

En su homilía, Mons. Aguer destacó el sentido de la peregrinación, tanto en el Antiguo como en el Nuevo Testamento. Y subrayó que «la Virgen María nos recibe en su casa, para llevarnos a nuestro encuentro pleno con Jesús. Estamos de paso; nuestra meta es la patria del Cielo»

Todos los años, en mayo, el sábado posterior a la solemnidad de Nuestra Señora de Luján, la Arquidiócesis de La Plata peregrina con sus parroquias, comunidades y colegios al Santuario de la Virgen; que estuvo bajo su jurisdicción desde 1897 -en que se erigió el Obispado de La Plata- hasta 1934, en que se erigió la diócesis de Mercedes. El clero, por su parte, también peregrina en noviembre; para darle gracias al Señor y a la Virgen por el año trascurrido, y prepararse para el Adviento y la Navidad.