Se realizó la Peregrinación de la Misericordia, a Santa María Magdalena.

Peregrinos atraviesan la Puerta Santa.

Santa Misa en el histórico templo.

Varios sacerdotes escucharon confesiones.

Antigua imagen de Santa María Magdalena.

El órgano, recientemente restaurado, contó con la interpretación del maestro Sebastián Achenbach.

Descubrimiento de la placa recordatoria de la peregrinación.

Con el marco del Año Jubilar de la Misericordia, las comunidades del Decanato Sur de la Arquidiócesis de La Plata peregrinaron hacia la parroquia Santa María Magdalena, en la localidad homónima, Ciudad de la Misericordia. Participaron las parroquias Nuestra Señora de Lourdes, de Verónica; Nuestra Señora de Luján, de Bartolomé Bavio; y la anfitriona Santa María Magdalena.

En el monumento a Jesús Misericordioso, sito en Alfonsín y Mir, se descubrió una placa conmemorativa. Y, luego, se emprendió la marcha a través del barrio 22 de Febrero, y calles de la ciudad de Magdalena; hasta llegar al templo parroquial, donde esperaba Mons. Alberto Bochatey, obispo auxiliar de La Plata. Durante la peregrinación se meditaron, entre oraciones y canciones, las obras de misericordia corporales y espirituales.

El nutrido grupo de fieles atravesó la Puerta Santa del templo parroquial; y se dio inicio a una Celebración Penitencial. Un buen número de fieles celebró el Sacramento de la Reconciliación, junto a todos los sacerdotes y el obispo, que escucharon las confesiones.

A continuación, Mons. Bochatey presidió la Santa Misa. Concelebraron los padres Gustavo Vives, párroco de Nuestra Señora de Lourdes; Nicolás Oyhamburu, párroco de Nuestra Señora de Luján; Alfredo López Morilla, párroco de Santa María Magdalena; Juan Omar Valdéz, vicario parroquial de Verónica; Juan Luis Lucero, vicario parroquial de Magdalena; y Miguel Barriola, profesor de Exégesis Bíblica del Seminario Mayor San José de La Plata. A la salida del templo, la concurrencia, compartió una merienda fraterna.

Según explicó el padre López Morilla, «fue una fiesta para toda la Iglesia, que peregrina en el Decanato Sur de la Arquidiócesis de La Plata. Debemos, entonces, agradecer el esfuerzo y la preparación de muchos que, con fe y alegría, colaboraron en  esta celebración. Un motivo de honra para Madalena, Ciudad de la Misericordia, declarada así por decreto del Concejo Deliberante, en 2001; y reconocida como tal por el Papa San Juan Pablo II».

Por otra parte, el Domingo 6, por la tarde, el templo parroquial  se llenó de música y voces, con la presentación del ensamble Lux Sonora, con la dirección de Camila María Beltramone, artista local, y Juan Manuel Saavedra.  Un buen número de personas asistió a este concierto de música barroca, y del siglo XIX. Cabe destacar la presencia del reconocido organista invitado Sebastián Achenbach; quien ejecutó el recientemente restaurado órgano, de origen alemán, del siglo XIX, con que cuenta el templo parroquial.

Los veintidós artistas, entre músicos, solistas y organista, interpretaron obras de Durante, Bach, Rheinberger y Zelenka. Constituyó un evento sin parangón para la comunidad parroquial, y el público en general. Fue la primera vez que se dio un concierto con estas características, en el histórico templo parroquial de Magdalena; cuya construcción data de 1860.

Historia de 500 años

Nunca supuso don Juan Díaz de Solís, cuando entró por el Mar Dulce, navegando a vista de la costa con una de sus naves llamada Magdalena, lo que sería el Pago de la Magdalena. Y que pocos años después, en 1530, don Pedro de Mendoza, con su nave capitana “Magdalena”, circundara la misma costa.

En 1611, poco más de treinta años después de la segunda fundación de Buenos Aires, el Cabildo de la Iglesia Catedral de Buenos Aires (folio 139 vuelta, del Libro Original) designa con el nombre de Pago de la Magdalena, la zona que abarca desde el margen sur del Riachuelo hasta el río Salado.

En 1615, Hernandarias, funda la Reducción del Cacique Tubichaminí, con asistencia religiosa. Luego la Reducción desaparece, por falta de sacerdotes que la asistieran. Ante la necesidad del cuidado pastoral, el Cabildo de la Catedral de la Ciudad de la Santísima Trinidad-Puerto de Santa María de los Buenos Aires, erige el Primer Curato del Pago de la Magdalena, el 23 de Octubre de 1730, con sede en Quilmes.

La sede parroquial de Magdalena estuvo en Quilmes hasta el 20 de Noviembre de 1776, cuando se inauguró la primitiva capilla en honor a Santa María Magdalena, en el actual Partido del mismo nombre. Ella estuvo destinada al culto hasta el 3 de Junio de 1860, cuando se procedió a la colocación de la piedra fundamental del imponente templo actual.

El 28 de Septiembre de 1780, el anterior Curato se dividió en tres: el de la Laguna de la Reducción, el de los Quilmes y el de Santa María Magdalena, también llamado de las Islas. En 1784 se constituyó el Partido de Magdalena, coincidiendo con la jurisdicción del Curato.

Cabe destacar insignes curas párrocos, entre los pastores de esta comunidad, como el Pbro. Dámaso Fonseca (1789-1790), llamado a decidir la suerte del Virreynato, en los tiempos que desembocaron en el primer gobierno propio. Y el Pbro. Dr. Manuel Alberti (1790-1794), prestigioso miembro de la Junta de Mayo.

Actualmente, la Parroquia de Santa María Magdalena, está en jurisdicción de la Arquidiócesis de La Plata. Es la parroquia más antigua de la misma, y una de las cinco históricas de la provincia de Buenos Aires. La sede parroquial, en su interior conserva, bajo una caja de acrílico protectora, la imagen histórica de Santa María Magdalena, vestida y de origen europeo, que data de la época de la primitiva capilla (entre 1730-1776). Además de una talla en madera de San José y el Niño, atribuida a los indios Tubichaminíes de la época de la Reducción.