Mons. Aguer en los 50 años de Sagrado Corazón de Jesús, de Cambaceres.

Al presidir los festejos por los 50 años de la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, de Cambaceres, Ensenada, el Arzobispo de La Plata, Mons. Héctor Aguer, recordó que «el fin de toda parroquia, como el fin de toda la Iglesia, es trabajar por la salvación de todos los hombres. Y, para ello, debe salir permanentemente a golpear las puertas de las casas del barrio y, sobre todo, las puertas de los corazones».
Subrayó, en tal sentido, que «con seguridad, Cambaceres ha cambiado mucho en estos cincuenta años. Pero el desafío sigue siendo el mismo: en cada católico debe haber un discípulo misionero, con pasión por la labor evangelizadora de la Iglesia. Esta es una de nuestras periferias. Por lo tanto, ¡a salir, a no tener miedo, a vivir con alegría nuestra condición de bautizados!».
Concelebraron con Mons. Aguer el administrador parroquial de Sagrado Corazón de Jesús, padre Christian Viña; el padre Marcelo Herdegen, capellán general del Hospital Churruca, de la Policía Federal Argentina; y los padres Gabriel Guajardo y José Eduardo Sánchez, de la parroquia Santa María de Betania, de la Capital Federal. Asistieron en el servicio litúrgico los Caballeros del Altar (Monaguillos) de la propia parroquia, y de la parroquia Beata María Ludovica de Ángelis, fundada por Mons. Aguer, en 2011, en una zona periférica de la capital bonaerense. Al concluir la Misa, Mons. Aguer, bendijo un cuadro del Beato Juan Pablo II, que fue obsequiado a la Parroquia por quien fuera durante 40 años su secretario privado, el hoy Arzobispo de Cracovia, Cardenal Stanislaw Dsiwisz.
Previamente a la Misa, se realizó una procesión por las calles del barrio, y por Villa Tranquila. En las quince cuadras del recorrido, los sacerdotes bendijeron distintas familias y comercios.
Sagrado Corazón de Jesús fue fundada, junto con otras cuatro parroquias, el 19 de marzo de 1964, por el entonces Arzobispo de La Plata, Monseñor Antonio Plaza. Las otras son: San José y Stella Maris, también de Ensenada (hasta entonces capillas dependientes de la Parroquia Nuestra Señora de la Merced, a cago de los salesianos); Nuestra Señora de la Salud, de Los Hornos, y Madre de la Divina Gracia, de Gonnet.

Agradecimiento del padre Viña

Antes de la bendición final, el padre Viña le agradeció a Mons. Aguer «su paternidad de tiempo completo, y su fuerte respaldo a parroquias de barrio, como la nuestra. Poco a poco, vamos recuperando distintas instituciones. Y, además de los Caballeros del Altar, de la Legión de María, del Grupo de Hombres «San José Obrero», de la Catequesis y de la Feria Americana, a cargo de miembros del Opus Dei, crecen sostenidamente las Damas de la Sacristía; institución fundada por sugerencia suya, y que brinda un notable aporte en el apostolado litúrgico, la confección, limpieza y cuidado de los ornamentos. De hecho, dos de sus miembros -una de 96 años, y otra de 75- realizaron las casullas que están usando hoy los concelebrantes y que, con mucho gusto, les obsequiamos».
La Misa de hoy, Solemnidad de San José, será presidida por el Obispo auxiliar, Mons. Nicolás Baísi, a las 19. Previamente, a las 18, habrá una Hora Santa, con exposición del Santísimo Sacramento, y Santo Rosario.