La Plata: Mons. Baísi y la “revolución del amor”, tras el temporal.
Al presidir la Santa Misa, en la Catedral Metropolitana, por las víctimas fatales del temporal, y todos los damnificados, el Obispo auxiliar de La Plata, Mons. Nicolás Baísi, al comentar el Evangelio del Domingo (Jn 20, 19 – 31), explicó que “hay que tocar, como Tomás, las llagas del Crucificado, para tener un encuentro vital con el Resucitado. Jesús glorioso sigue teniendo las llagas, y en ellas somos sanados; y tenemos el camino de la Vida en abundancia”.
Mons. Baísi sostuvo que “es conmovedor ver cómo, en medio de tanta muerte, de tanto dolor, de tantas pérdidas, se produjo una silenciosa revolución juvenil basada en el amor. Y quedó demostrado, una vez más, que la confrontación no es el motor de la historia; sino el amor. Porque Dios, principio y fin de la historia, es Amor”.
Agregó que “hay una silenciosa revolución de gente común que, conmovida, hace el bien y que es ejemplo para todos. Y que nos ha permitido, en medio del dolor, contemplar con gozo el amor de Jesús. Gente feliz haciendo el bien».
Destacó que “ese dolor les puede ayudar a profundizar su fe en Jesús –continuó-. Sabemos que si somos capaces de compartir, de tener compasión, de tener misericordia por el dolor de nuestros hermanos, también nosotros vamos a tener fe».
Dijo, asimismo, que “en esta Misa también pedimos nosotros por tantos voluntarios. Por tanta gente de la sociedad civil que generosamente ha colaborado: familias enteras que traían comida, que traían la ropa de sus hijos, su ropa, que venían de lejos y muy lejos para ayudar. Gente que pasó todo el día y la noche y seguía trabajando. Conmueve ver tanta caridad. Tanta solidaridad. Tanta gente que está de verdad conmovida por el dolor del hermano, y que no solamente se conmueve, sino que pone manos a la obra y hace el bien”.
Cercanía y ayuda del Papa Francisco y Mons. Aguer
Antes de la bendición final, Mons. Baísi les trasmitió a los fieles la cercanía y ayuda del Papa Francisco; quien, a través del Pontificio Consejo “Cor Unum”, para la promoción del desarrollo humano y cristiano, envió cincuenta mil dólares para los damnificados. Y del Arzobispo platense, Mons. Aguer, quien se encuentra en Roma para la reunión de la Pontificia Comisión para América Latina; y que fue recibido, este lunes, por el Santo Padre.
Mons. Aguer –quien permanentemente está siendo informado de la evolución de la tragedia, por sus dos Obispos auxiliares- le dio detalles al Papa de todo lo que está realizando la Iglesia en estos días, para socorrer a los damnificados y consolar a las víctimas. Y de las acciones que se encaran para la reconstrucción espiritual y material de todos los afectados.
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