Cambaceres le agradeció a la Virgen haber evitado una tragedia.
La Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, de Cambaceres, Ensenada, realizó este jueves 27, la tradicional procesión de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa. En este 2014, en el que la Parroquia cumplió cincuenta años, tuvo también una profunda gratitud a la Virgen, por haber evitado una tragedia el pasado 25 de octubre, cuando una ambulancia embistió el frente del templo, poco después de concluida la Misa, y lo destrozó de forma completa.
La marcha recorrió veinte cuadras del barrio y de Villa Tranquila. Y llevó, también, la imagen de San Andrés; muy venerada por los pescadores del barrio.
Presidió la procesión el Obispo auxiliar de La Plata, Mons. Nicolás Baisi; a quien acompañaron el padre Christian Viña, administrador parroquial, y el padre Jorge Masuelli, capellán del Hospital Italiano, de La Plata. Asimismo, la Banda de Música de la Policía de la Provincia de Buenos Aires interpretó temas religiosos; y aportaron su entusiasmo y fervor apostólico los Caballeros del Altar, las Damas de la Sacristía, y la Hermandad del Señor de los Milagros, de la colectividad peruana.
Al término de la procesión, se celebró la Santa Misa, en la que se rezó por el eterno descanso de los donantes y benefactores de la primitiva capilla, iniciada en 1936; por los párrocos y los demás fieles difuntos. Igualmente, se pidió por las autoridades municipales de Ensenada, y por todos los benefactores que, en esta hora, están contribuyendo para la reconstrucción.
Al bendecir el nuevo frente del templo -al que solo le faltan algunos detalles-, Mons. Baisi destacó que «Jesús es la puerta del Cielo. Y, cada vez que atravesamos la puerta de un templo, ingresamos con Jesús hacia ese lugar sagrado; lleno de vida en abundancia. Nuestra gratitud -enfatizó- es muy grande hacia el Señor y hacia la Virgen, por haber evitado una tragedia hace tan solo un mes. ¡Que ellos renueven nuestra fe, y nos sigan guiando con creciente alegría a la Casa del Señor!…»
La Parroquia Sagrado Corazón de Jesús, junto con otras cuatro parroquias más de la Arquidiócesis de La Plata, cumplió en este 2014 cincuenta años de su erección canónica, por parte del entonces arzobispo, Mons. Antonio Plaza. La piedra fundamental de la primitiva capilla fue bendecida, en diciembre de 1936, por el entonces Obispo auxiliar de La Plata, Mons. Anunciado Serafini. Desde entonces, y hasta 1965, fue atendida por los padres salesianos, de la Parroquia Nuestra Señora de la Merced, de Ensenada. Entre otros, fueron sus párrocos los extintos padres Marcelino Escanciano Díez, salesiano; Félix Bianchini, Carlos Homola y Carlos Astorga. Forma parte de una de las periferias platenses, con más crecimiento en sus barriadas.
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