La Plata: Mons. Aguer bendijo la placa con el nombre de «Papa Francisco» para calle 53

El Arzobispo de La Plata, Mons. Héctor Aguer, bendijo la placa con el nombre de “Papa Francisco”, para el céntrico tramo de la calle 53, entre 14 y 19. La misma fue colocada en una de las paredes de la Curia Arzobispal, en dirección hacia la Catedral.

La iniciativa de llamar con el nombre del Santo Padre a ese sector de la arteria surgió de la Municipalidad platense, representada en el acto por el Intendente Pablo Bruera, y distintos concejales. Y en sus considerandos, se pusieron de relieve los vínculos del ahora Sumo Pontífice, con la capital bonaerense.

En sus palabras, Mons. Aguer indicó que “conociéndolo como lo conozco, desde hace 35 años, por su modestia, no sé si al Papa le hubiese gustado este reconocimiento. Sé, de cualquier modo, que con la enorme cruz que ahora lleva como Sucesor de Pedro, seguramente lo tomará como un homenaje al empeño de la Iglesia por anunciar a Cristo, con el marco de la Nueva Evangelización”.

Ante una pregunta del periodismo, el prelado platense reveló que viajará el próximo lunes 1º de abril a Roma, para un encuentro de la Pontificia Comisión para América Latina, de la que forma parte, “y que es muy probable un encuentro con el Papa Francisco. Le trasmitiré, entonces, la cercanía y la oración del pueblo platense”.

Sostuvo, asimismo, que “la Iglesia vive días de entusiasmo, y que ello se ha manifestado en el incremento de fieles en los templos. Apenas se conoció la elección del Papa, numerosas personas se dieron cita en la Catedral. Y el Obispo auxiliar, Mons. Nicolás Baísi, celebró inmediatamente una Misa en acción de gracias. Asimismo, en la Santa Misa arquidiocesana, a la que convoqué para el Domingo 17, con el fin de dar gracias a Dios por su elección, la Catedral se llenó; y nos hizo recordar otras grandes celebraciones de la Iglesia platense”.

Estimó, igualmente, que “ahora, todo este fervor, debe traducirse en un mayor compromiso de los fieles, en la Iglesia. Como lo viene sosteniendo el Papa, debemos anunciar con pasión a Jesucristo; y testimoniarlo, especialmente, en los ámbitos públicos, en los diversos ambientes. No se trata de recluirse ni aislarse. Por el contrario, estos días de alegría –concluyó- deben dar como frutos más y más obras apostólicas, más profundización de la fe, en el Año de la Fe, y más voluntad de ser testigos valientes de Jesucristo”